La diabetes mellitus es una de las enfermedades crónicas de más impacto en nuestra sociedad debido a su alta prevalencia, que se estima que es del 7% en España.
En el curso de su evolución, la diabetes puede conducir a la aparición de complicaciones crónicas como la retinopatía, nefropatía y neuropatía, así como un incremento de la cardiopatía isquémica, la enfermedad cerebrovascular y la arteriopatía periférica.
La neuropatía es la complicación más frecuente en la diabetes. Se estima que alrededor del 40 % de los diabéticos tipo 2 presenta algún tipo de alteración neuropática en el momento del diagnóstico, Esta prevalencia se incrementa con el tiempo de evolución de la diabetes y con la edad. (Cabezas-Cerrato, 1998). El riesgo de desarrollar enfermedad vascular es entre dos y cuatro veces mayor que entre los no diabéticos. Además, en las mujeres este riesgo se ve duplicado.
La neuropatía y la arteriopatía de las extremidades inferiores intervienen con mucha frecuencia en la afectación de los pies, por ello es muy importante conocer de forma precoz si existe algún riesgo a fin de establecer un programa de prevención o tratamiento de lesiones en el pie.
El tratamiento podológico precoz junto a un buen control de la glicemia son las mejores armas que el paciente dispone para evitar o retardar la aparición de úlceras en los pies.
Servicios al pie diabético:
– Atención integral
– Educación diabetológica podológica
– Programa de screening:
- Detección precoz de la vasculopatía (doppler arterial)
- Detección precoz de la neuropatía (evaluación de las sensibilidades)
- Exploración biomecánica (plataforma de presiones)
- Exploración radiológica.
- Clarificación del riesgo
- Recomendaciones
– Tratamiento del pie diabético ulcerado